Como cada 1º de agosto, el Garrahan tuvo su propia celebración por el Día de la Pachamama, congregando a trabajadoras y trabajadores e integrantes de los pueblos originarios que realizaron el típico ritual.
Un grupo de trabajadoras y trabajadores se reunió ayer para celebrar el Día de la Pachamama, un ritual ancestral de los pueblos originarios de la zona andina en el cual se honra y venera a la Madre Tierra, agradeciéndole por las cosechas, el clima, los animales y la abundancia en el suelo.
“Que se haga en el Hospital es grandioso, porque acá vienen chicos a sanarse y a la Pachamama también se le pide mucha salud. Inclusive más de una vez participaron niños y familiares y les generó un alivio espiritual”, dijo Silvia Jurado, perteneciente a los pueblos originarios e integrante del grupo que organiza la ceremonia desde hace más de 15 años.
El evento consiste en cavar un pozo que representa a la boca de la tierra e introducir alimentos no procesados, bebidas y hierbas con el fin de alimentar a la Pachamama y devolver lo que la naturaleza provee. Luego de las ofrendas, se agradece de la forma que cada persona desee y comienzan a escucharse cantos típicos de la región.
La celebración tiene lugar cada primero de agosto. En el Hospital se realiza desde 1992 con un espíritu participativo, colaborativo y no religioso. Es promovida por la coordinación de Relaciones Institucionales y el comité de Intercultural y Salud y organizada por trabajadoras, trabajadores y miembros de los pueblos originarios.