El Garrahan reitera las recomendaciones para prevenir la enfermedad transmitida por el mosquito. Cuándo sospechar dengue y a qué síntomas estar atentos.
Frente al aumento de casos de dengue en el país, el Hospital Garrahan recuerda a la comunidad las principales medidas de prevención de la enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti: eliminar los criaderos de mosquitos, evitar las picaduras de mosquitos con el uso adecuado de repelentes, y realizar la consulta temprana en caso de presentar síntomas de la enfermedad.
Disminuir las poblaciones de los mosquitos vectores es la forma más eficaz para cortar el ciclo de transmisión de las enfermedades que pueden transmitir. Además, existe una serie de medidas simples para prevenir las picaduras. En tanto, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó en nuestro país el uso de la vacuna contra el dengue desarrollada por el laboratorio japonés Takeda para todas las personas mayores de 4 años, hayan cursado o no previamente la enfermedad.
En el caso del mosquito transmisor del dengue y otras arbovirosis, como Zika y Chikungunya, la medida más importante de prevención es la eliminación de todos los criaderos de mosquitos, es decir, de todos los recipientes que contengan agua o que puedan hacerlo, tanto en el interior de las viviendas como en sus alrededores.
Para ello, es importante:
● Eliminar todos los recipientes en desuso que puedan acumular agua (latas, botellas, neumáticos, etc.) dentro y fuera de la vivienda y/o lugar de trabajo.
● Dar vuelta, tapar o resguardar los objetos útiles que se encuentran en el exterior y pueden acumular agua de lluvia o riego (baldes, palanganas, tambores, juguetes, etc.).
● Cepillar, limpiar y cambiar regularmente el agua de bebederos de animales cada 2 o 3 días, cubrir y desagotar los colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia. Cepillar o frotar las paredes internas del recipiente es fundamental para desprender los huevos de mosquitos que estén adheridos allí.
● Evitar plantas en recipientes con agua o cambiarla frecuentemente (cada 2-3 días, con el mismo procedimiento que en el punto anterior).
● Reemplazar el agua de las macetas o contenedores de plantas por arena, evitando que se forme un charco en la parte superior.
● Rellenar los porta-macetas con arena a fin de absorber el excedente de agua de riego.
● Mantener los patios y jardines desmalezados.
● Destapar canaletas y desagües de lluvia.
● Verter agua caliente (100°C) en las paredes de rejillas de desagüe y colocarles mallas metálicas o tela mosquitera.
● Mantener tapados los tanques y recipientes (aljibes, cisternas, etc.) que se usan para recolectar y almacenar agua, evitando dejar espacios o aberturas por donde los mosquitos puedan ingresar.
● Mantener limpias y cloradas las piletas de natación. Cubrirlas cuando no se utilicen.
Medidas de protección ante picaduras
Para evitar la picadura del mosquito se recomienda tomar las siguientes medidas de protección:
● Usar repelentes de acuerdo a la edad y según las recomendaciones del envase.
● Utilizar ropa clara que cubra brazos y piernas, especialmente durante las actividades al aire libre.
● Utilizar ahuyentadores domiciliarios de mosquitos como tabletas, aerosoles solo en lugares abiertos y/o espirales (exterior) de acuerdo a las recomendaciones del producto.
● Colocar mosquiteros en puertas y ventanas de los hogares.
● Proteger camas, cunas y cochecitos de bebés con telas mosquiteras o tules.
Las personas embarazadas deben extremar estos cuidados.
Acerca de la vacuna contra el dengue
La vacuna contra el dengue, aprobada en nuestro país por la ANMAT el año pasado, brinda protección contra cualquiera de los cuatro serotipos de dengue. El esquema de vacunación consiste en la aplicación de dos dosis separadas con una diferencia de tres meses.
Si bien ninguna vacuna cumple la función de bloqueo frente a un brote de dengue como el que tiene lugar actualmente en nuestro país, se trata de una inmunización eficaz y segura para prevenir la infección y la hospitalización por dengue.
Por el momento no se encuentra incorporada al Calendario Nacional de Vacunación y no se han determinado los grupos prioritarios para recibirla.
La mejor estrategia de prevención sigue siendo el control y eliminación de criaderos de mosquitos, así como las medidas de prevención para evitar picaduras y el empleo de métodos de aislamiento vectorial (repelentes, espirales, etc.).
Si bien en las épocas de calor, la fumigación colabora en la reducción de insectos, es preciso saber que solo mata a una parte de los mosquitos adultos y no afecta a las larvas, pupas y huevos.
Definiciones de caso sospechoso
Toda persona que resida o haya viajado en los últimos 14 días a un área con circulación viral de dengue o presencia del vector y
a. Presente fiebre, de menos de siete (7) días de duración, sin síntomas de vías aéreas superiores y dos o más de los siguientes signos y síntomas:
● Náuseas/vómitos
● exantema (erupciones cutáneas),
● mialgias, artralgias
● cefalea/dolor retro ocular,
● petequias/prueba del torniquete positiva,
● leucopenia,
● anorexia, malestar general, diarrea, plaquetopenia;
● Cualquier signo de alarma: 1. Dolor abdominal intenso o dolor a la palpación del abdomen 2. Vómitos persistentes 3. Acumulación de líquidos (ascitis, derrame pleural o pericárdico) 4. Sangrado de mucosas 5. Letargo / irritabilidad 6. Hipotensión postural (lipotimia) 7. Hepatomegalia >2 cm 8. Aumento progresivo del hematocrito
La vigilancia epidemiológica se realiza en forma integrada bajo el evento denominado “Síndrome Febril Agudo Inespecífico” (SFAI) que se corresponde con la ficha de notificación que debe acompañar a la solicitud del laboratorio ante la sospecha de cualquiera de las infecciones transmitidas por mosquitos incluyendo Dengue, Chikungunya, Zika.
Síntomas
El dengue y otras arbovirosis, como Zika y Chikungunya, generalmente suelen tener un período de incubación entre 2 a 7 días, según el caso, y suponen la presencia de fiebre alta -mayor a 38°C- acompañada de uno o más de los siguientes síntomas:
● Dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y/o de articulaciones.
● Náuseas y vómitos.
● Cansancio intenso.
● Aparición de manchas en la piel y picazón.
● Sangrado de mucosas (principalmente nariz y encías).
● Trastornos del sensorio (ciclos de somnolencia e irritabilidad).
Ante la presencia de síntomas es fundamental no automedicarse y realizar una rápida consulta al centro de salud más cercano. Luego de haber recibido el diagnóstico, es importante seguir las indicaciones del personal de salud, tomar abundante agua, hacer reposo, usar repelente y asistir a las consultas de seguimiento y control.
Si al momento de disminuir la fiebre, o en los días posteriores, alguno de los síntomas se agudiza, reaparece o se detectan síntomas nuevos (dificultad para respirar, dolor abdominal intenso, sangrado profuso de mucosas, vómitos recurrentes) es muy importante realizar una consulta médica inmediata. El tratamiento oportuno y adecuado disminuye la probabilidad de experimentar formas graves de la enfermedad.